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Samuel "Sam" William Winchester es uno de los protagonistas de la serie Supernatural. Es interpretado por el actor estadounidense Jared Padalecki.




Es en parte demonio, puesto que Sam bebió sangre de demonio cuando tenía seis meses de edad. Ese demonio fue Azazel, cobrando su parte de un trato que hizo con Mary Winchester (la madre de Sam y Dean) por haberle devuelto la vida a John Winchester (su marido y padre de los hermanos Winchester). Azazel pretendía así preparar a Sam para ser el envase o "Vessel" de Lucifer, tal y como dictaba la profecía.

Historia[]

Samuel William Winchester nació el 2 de Mayo de 1983 en Lawrence, Kansas. Sus padres son John y Mary Winchester y tiene un hermano mayor llamado Dean, que es cuatro años mayor que él. La tragedia cayó sobre la familia el día en el que Sam cumplía los seis meses, cuando un demonio (Azazel o "Ojos amarillos") mató a su madre haciendo que ardiera en el techo de la habitación de Sam. Desde ese momento, su padre (John), se obsesiona con saber quién mató a su mujer y dedica su vida desde entonces a ser cazador de criaturas sobrenaturales a lo largo del país, con la intención de dar con el que mató a su mujer.

El pequeño Sam, al cuidado la mayor parte del tiempo de su hermano Dean, comienza a llevar una vida fuera de lo normal (siendo instruído a seguir con "el negocio familiar", la caza de seres sobrenaturales) lo cual provoca en él cierto rechazo y hará que, poco a poco, vaya acumulando cierto rencor hacia su familia deseando escapar de ella en cuanto tenga la posibilidad para llevar una vida más normal.

Al crecer, Sam se convierte en un chico independiente y cuando por fin se hace adulto, decide llevar su propia vida, alejado de la caza. Sam no quiere ser cazador tal y como ha hecho su hermano Dean, siguiendo los pasos de su padre, sino que quiere ir a la universidad y convertirse en abogado. Cuando se marcha para cumplir con ello, tiene una fuerte confrontación con su padre, con quien no volverá a hablar durante más de dos años.

En la universidad conoce a Jessica Moore, quien se convertirá en su novia y con la que llega incluso a compartir apartamento. Sin embargo, su vida vuelve a dar un giro cuando una noche, aparece Dean y le dice que su padre ha desaparecido y que necesita su ayuda para encontrarlo. Sam acepta a acompañarlo, pero sólo durante el fin de semana, aunque la misión se tuerce.

Al pasar los dos días y no tener ninguna nueva pista del paradero de su padre, excepto unas coordenadas para cumplir una nueva cacería, Sam decide volver a casa, sólo para encontrarse con Jessica en el techo y verla morir de la misma forma que lo hizo su madre.

A partir de aquel momento, y al igual que hizó su padre, decide dedicar su vida a la caza para dar con el paradero del demonio que mató a su madre y a Jéssica. Es entonces cuando Dean lo saca de allí, y Sam decide acompañar a su hermano hasta encontrar a su padre y acabar con la criatura que mató a su novia.

Su relación con Dean[]

Desde el momento en el que se embarca en el "negocio familiar" con su hermano, Sam se da cuenta que son terriblemente diferentes y que cada uno ve las cacerías de una forma completamente distinta. Mientras el único propósito de Dean es encontrar a su padre y ayudar a la gente que sufre problemas del tipo "paranormal", Sam quiere encontrar al demonio que mató a Jessica, tomar venganza y volver a su vida "normal". De esta forma, la caza es un modo de vida para Dean, mientras que para Sam solo es un medio.

Sam es responsable, sensato y piensa las cosas varias veces antes de llevarlas a cabo mientras que Dean se deja llevar por sus impulsos y emociones. De esta forma vemos que Sam es "la cabeza" en muchos casos mientras que Dean es "el corazón", siendo este el motivo de muchas de sus disputas.

Sin embargo, su punto de vista va cambiando poco a poco conforme transcurren los capítulos, sobre todo cuando entra en la segunda temporada, ya que termina por no poder imaginar una vida sin su hermano cerca. A partir de entonces demuestra que sería capaz de hacer cualquier cosa por él, al igual que también lo hace Dean en otros momentos, llegando a dar la vida el uno por el otro.

Mientras al principio, Sam es un chico totalmente independiente, que lleva unos años fuera del seno familiar, conforme pasa el tiempo, se siente completamente unido a su hermano, tanto que arriesgará su vida por él si es necesario y cuando la vida de Dean esté en peligro usará todas sus posibilidades, por remotas que sean por ayudarle. ==Su relación con John La relación con su padre no fue fácil desde el momento en el que dijo que quería marcharse a la universidad. A partir de ese momento padre e hijo dejaron de hablarse y la única relación que tenían era a través de Dean. Haciendo que el lazo entre Sam y Dean fuera más fuerte.

En los momentos en los que los tres se juntan, las disputas aparecen rápido porque mientras Dean está dispuesto a seguir las directrices de su padre al pie de la letra y sin preguntar, Sam no está dispuesto a volver a obedecer sin más y trata de conseguir respuestas y justificaciones a los actos o decisiones que toma su padre. Explicaciones que John, al principio, no está dispuesto a darle. Esto supone, en muchos casos, discusiones o confrontaciones entre Sam y Dean, que comparten puntos de vista muy diferentes.

Sin embargo, tal y como dicen en más de una ocasión, los dos Winchester (Sam y John) son mucho más parecidos de lo que ellos creen, motivo por el cual se producen todos sus enfrentamientos. Aparte de unirles la pérdida de sus mujeres, tanto Sam como su padre, están dispuestos a sacrificarse si es necesario para acabar con el demonio, sin importarles perder la vida por ello o no.

Amores y escenas eróticas de Sam[]

El amor de Sam, siempre será Jessica, pero a lo largo de las cuatro primeras temporadas, conoce a varias mujeres que le hacen abrirse de nuevo. En primer lugar, aparece Sarah, una chica extrovertida y valiente que les ayuda en una cacería, pero con la que apenas ocurre nada, más adelante una escena intensa muestra a un Sam poseído por la demonio Meg intentando abusar de la joven cazadora Jo, siendo esto impedido por Dean. Después aparece Madison, de la que Sam si se enamora, pero que por ser una mujer-lobo, Sam debe matarla porque no pueden curarla, y en la tercera aparece Ruby, una demonio que le ayuda a disolver el trato de Dean y que luego se vuelve su amante. En esta temporada se muestra una fantasía erótica de Sam con Bela Talbot. Además en la segunda temporada se aprecia como Sam intenta ver una película erótica, pero no la ve porque lo interrumpe Dean.

En la cuarta temporada se muestra directamente como Sam y Ruby (ahora con otra apariencia) se convierten en amantes. En la vida real, Jared está casado con Genevieve que interpretó a "la nueva" Ruby. Con ella tiene tres hijos.

En el capítulo "Sex and Violence" de esta temporada Sam tiene una intensa aventura de una noche con la sensual Dra. Cara Roberts, en este mismo episodio se revela que Sam es lo que Dean más ama, pero Sam le responde duramente hiriéndolo y ocasionando así una brutal pelea entre ambos, cuando Dean, despechado está a punto de matar a Sam, Bobby se lo impide. Aún así también se muestra en ocasiones que Sam ama profundamente a su hermano. Más adelante podemos ver la que aparentemente será una escena de sexo entre Sam y una Lilith adulta la cual no llega nunca a realizarse.

De manera cómica recortamos el manoseo al que se ve sometido Sam por una pícara anciana clienta de Bela y por la psíquica a la que Castiel dejó ciega: Pamela Barnes, la cual dice reconocerlo tras estrujarle el trasero y exclamar "¡se puede hacer rebotar una moneda en esa cosa!". En el primer episodio de la cuarta temporada, Pamela les propone a Sam y Dean hacer un trío, fantasía que obviamente no cumplió.

El único beso que pudimos observar entre Sam y la primera Ruby ocurre al final de la tercera temporada, aunque realmente no fue con Ruby pues su cuerpo había sido poseído por Lilith quien besó a Sam tras asesinar a Dean mientras Sam presenciaba impotente y horrorizado la escena.

Muerte y Resurrección[]

En el penúltimo capitulo de la segunda temporada, Sam junto con los otros chicos de su generación son secuestrados por Azazel y reunidos en un lugar apartado, del que solo uno debe salir con vida. Conforme pasan las horas, los chicos comienzan a matarse unos a otros, y al final, cuando Dean por fin ha descubierto donde esta Sam y acude a su ayuda, el último sobreviviente (un soldado traído desde Afganistán) clava un cuchillo en su espalda frente a Bobby y Dean, matándolo al instante.

Al cabo de una semana, Dean se niega a enterrar a Sam, y busca a un demonio de los cruces de caminos para hacer un trato: revivir a Sam a cambio de su alma, la demonio acepta y le da un año de vida antes de mandar a su Cancerbero a por él, pese a la oposición y reproche de Bobby. Sam revive y junto a Dean y Bobby buscan a Azazel. Sam mata a su asesino pero descubre que éste le había matado, y por lo tanto, que Dean hizo un trato para salvarlo.

Azazel usa la Colt (una pistola con poderes especiales como el de matar demonios) para abrir el portal al infierno y liberar a todos los demonios. En el momento en el que Azazel va a matar a Dean aparece el espíritu de John, su padre, quien ayuda a los hermanos. Finalmente Dean, usando La última bala de la Colt, mata a Azazel, vengando así la muerte de su madre y de Jessica. La siguiente misión de Sam fue buscar a Lilith y detenerla antes de que se cumpliera el plazo para poder salvar así a Dean del infierno, algo que no lograría.

Transformación de Sam[]

En la cuarta temporada, Sam se distancia notablemente de su hermano. La relación entre los Winchester se ve severamente dañada cuando Sam comienza a mentirle y ocultarle cosas a Dean logrando que este pierda la confianza en él. Para Dean esto supone un duro golpe , ya que el cambio de Sam implica que su lado "oscuro" está creciendo y Dean siempre se negó a creer que en su hermano menor existiese una sola gota de maldad.

Los conflictos entre ambos llegan al grado de que Sam, en varias ocasiones, trata de manera bastante cruel y fría a Dean causando en él un profundo dolor y desilusión. A pesar de todo esto, Dean no se rinde y en ningún momento deja de luchar por recuperarlo y salvarlo, aunque para esto tenga que enfrentarse a él mismo.

Una de las causas del cambio de Sam fue su relación con Ruby, quien se encarga de llevarlo por caminos bastante peligrosos, convirtiéndose en una terrible influencia para él. De hecho es ella la que le da sangre de demonio y lo incita a usar sus poderes, haciendo que el lado malvado de Sam crezca durante esta temporada.

Curiosidades[]

  • Si hay algo que caracterice al pequeño de los Winchester, es su ordenador portátil. Mientras para Dean, su amor por el Impala es incomparable, Sam no irá a ningún lado sin su portátil, indispensable, por otro lado, para la mayoría de sus investigaciones.
  • Sam, a diferencia de Dean, casi siempre pide ensalada para comer y rara vez se lo ve comiendo comidas rápidas.
  • Ama a los perros.
  • Si la mayor fobia de Dean son los aviones, en el caso de Sam, su mayor terror, son los payasos. Miedo al que tiene que enfrentarse, por ejemplo, en la segunda temporada.
  • Conforme vamos conociendo al personaje, se va descubriendo que tiene algún tipo de poderes mentales, al igual que otros de los niños de su generación (escogidos por el demonio Azazel). Este tema, forma parte de la mitología central de las dos primeras temporadas.
  • El demonio de ojos amarillos (Azazel) tiene un plan para los chicos como Sam. Su padre al morir le dice a Dean que si llegara a pasar algo tendría que matar a Sam para proteger al mundo.
  • Sam tiene en la parte izquierda de su pecho un tatuaje (idéntico al de Dean) que los protege de posesiones demoníacas.
  • Ha muerto varias veces y ha estado tanto en el cielo como en el infierno y hasta en el purgatorio. Incluso entre los capítulos 6x01 y hasta el 6x12, se encuentra sin alma.
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